Una cuestión de supervivencia

Por Paulina Prohaska M.

El escenario es poco optimista. No sólo porque aún existe una lamentable brecha del 36% en participación laboral, la brecha salarial y el acceso a posiciones de liderazgo, sino porque estas cifras exponen todo lo que aún nos queda por hacer y lo poco que se ha avanzado en visibilizar a los liderazgos femeninos.

Si bien es una buena noticia que el Global Gap Gender Report 2023 del Foro Económico Mundial informara que Chile ha reducido la brecha de género entre hombres y mujeres, mejorando 20 posiciones del ranking mundial respecto del 2022, aún el escenario es poco optimista. No sólo porque aún existe una lamentable brecha del 36% en participación laboral, la brecha salarial y el acceso a posiciones de liderazgo, sino porque estas cifras exponen todo lo que aún nos queda por hacer y lo poco que se ha avanzado en visibilizar a los liderazgos femeninos.

Sin embargo, este desafío, -del que debemos hacernos cargo como sociedad-, constituye una gran oportunidad para nosotras. Y es que en este entorno cada vez más competitivo, dinámico y exigente, tener una marca personal sólida y potente, que nos permita influir para generar cambios sociales positivos desde desde ciertas cualidades que las mujeres tenemos como la empatía, la multitarea y la colaboración, entre otros, no es sólo necesario y urgente, sino que también ineludible si queremos ser reconocidas como líderes. Es casi una cuestión de supervivencia, y lo bueno, es que depende solo de nosotras.

De ahí que estamos convocadas a trabajar nuestro autoconocimiento, que nos podría regalar un mejor desarrollo personal y profesional. Y si lo hacemos con convicción, podríamos desarrollar nuestra propia estrategia de posicionamiento para ganar la visibilidad que tanto deseamos, necesitamos y, por supuesto, merecemos. Esto es, sin duda, también nuestra responsabilidad.

Paulina Prohaska M.

Periodista, Master en Acción Política y Participación Ciudadana

Directora de Comunicaciones Fundación Pacto Social